Hasta la comuna de Osorno, llegó la Seremi de Desarrollo Social y Familia, Soraya Said Teuber junto a Yerko Villanueva, Director del Hogar de Cristo para realizar un llamado a la ciudadanía, a corredoras de propiedades e inmobiliarias con el fin de conseguir disponibilidad de inmuebles para arrendar y acondicionar viviendas para personas en situación de calle.
El programa Vivienda Primero del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, es un programa Social para personas en situación de calle basado en amplia evidencia internacional, una solución centrada en la vivienda para un grupo de la población que requiere niveles significativos de apoyo para salir de dicha situación, dijo Soraya Said, seremi de Desarrollo Social.
Al respecto, la Seremi, señaló “faltan espacios para completar los cupos de las veinte personas que serán parte de esta iniciativa en la comuna de Osorno, necesitamos arrendar aún seis viviendas”.
El programa Vivienda Primero (Housing First) se centra en el cambio de paradigma hacia las personas en situación de calle, pone el énfasis en los derechos y dignidad de las personas, entregando una vivienda y acompañamiento durante 36 meses para dar los primeros pasos hacia la autonomía e independencia. Esta estrategia ha demostrado un impacto muy positivo, donde 8 de cada 10 participantes del programa no vuelven a la calle.
Actualmente, el programa está instalado en 3 regiones del país, con 161 personas ingresadas en 77 viviendas. El 60% de los participantes han reconstituido sus vínculos familiares y 50% de ellos comenzaron a tener vínculos con sus hijos. En primera instancia el programa será implementado en la comuna de Osorno con un cupo para 20 participantes.
“Este es principalmente un llamado a la confianza, el Hogar de Cristo como muchas otras organizaciones y el Estado, han trabajado fuertemente para evitar que las personas mueran en la calle, eso es un objetivo muy noble pero nos costaba mucho encontrar la manera para que pudieran desarrollar alternativas reales de proyectos de vida. Este programa cambia el chip completamente, ve la vivienda como un derecho social” afirmó Yerko Villanueva, Director del Hogar de Cristo.
Las personas que estaban en situación de calle se mudan a una vivienda arrendada y equipada. Una vez que las persona se encuentran viviendo en sus casas de manera estable, se comienza a trabajar en conjunto a un equipo profesional en un plan de intervención personalizado.
El acompañamiento es brindado por profesionales, entre ellos, un coordinador general, un profesional de apoyo domiciliario (terapeuta ocupacional) y un profesional comunitario (trabajador social, psicólogo o carrera afín). La inversión por parte del Ministerio de Desarrollo Social y Familia es de 200 millones de pesos (cada 18 meses).