Diversas expresiones de respeto y amistad manifestaron las cientos de personas que en distintos horarios llegaron a la parroquia Jesús Obrero y a la Iglesia Catedral de Osorno para despedir al querido padre Francisco Javier Triviño Andrade, quien falleció el pasado miércoles 30 de octubre.
El sacerdote diocesano o padre “Pancho” como lo llamaban su más cercanos, amigos y familiares, fue un hombre sencillo, alegre, cercano, acogedor con la gente, muy organizado y “futbolero”. Así fue recordado por diversas personas que entregaron su testimonio durante su velatorio, y en la Santa Misa de Exequias que se realizó durante la tarde de este jueves 31 de octubre en la Catedral San Mateo Apóstol.
Cientos de personas, familiares, agentes pastorales, amigos, sacerdotes, diáconos y religiosas acompañaron al fallecido párroco de la parroquia Jesús Obrero de Rahue Alto, quienes, después de la celebración eucarística también acompañaron en procesión hasta el Cementerio Católico de Osorno, donde se realizó su funeral.
La misa de exequias fue presidida por el obispo de Osorno, Carlos Godoy Labraña, junto con entregar su mensaje desde las lecturas y el evangelio del Camino de Emaús proclamado en la ocasión, y dijo “Gracias padre Francisco por tu ministerio en medio de nosotros, gracias por haber querido tanto a la Iglesia de Osorno de la que fuiste parte, gracias por no olvidar tus raíces y siempre sentirte un cura poblador»
Tras la ceremonia, el obispo de Osorno, Carlos Godoy Labraña, destacó la profunda entrega del sacerdote hacia la comunidad, reflejada en la gran cantidad de personas que participaron tanto en la misa como en el último adiós en el Cementerio Católico.